sábado, 21 de noviembre de 2009

Las irregularidades del avión venezolano

Escribe Alberto Vargas Peña Para comenzar debo hacer mención a un episodio muy anterior con referencia a otro avión venezolano que aterrizó en Asunción el día de la muerte de Anastasio Somoza. Llegó en silencio y se fue luego de finiquitar el proceso de conducir a los asesinos rumbo a su libertad.
Mucho después, con las declaraciones de Gorriarán Merlo, se supo que los asesinos no habían abordado el avión, sino que cruzaron el río Paraguay gracias a pagos realizados a sus paseros.Esta mención es para demostrar que un avión sin controles puede traer cualquier cosa y llevarla, sin que nadie se entere. Los aviones militares, presidenciales, ambulancias y otros, tienen sus características definidas por tratados internacionales que son respetados por todos los países del mundo.Los aviones militares solicitan el permiso para entrar en el espacio aéreo de un país a la Fuerza Aérea, la que queda encargada de finiquitar el proceso de aterrizaje, y otros puntos , llegada de personas para los aterrizajes, decolages, carga, etc. Aviones militares de los Estados Unidos que traen carga para la embajada, tienen, desde hace tiempo, un sistema especial.El avión venezolano, el Hércules C 130 que aterrizó el jueves antepasado, debió informar a la FA paraguaya de su arribo, su lista de pasajeros y la razón de su aterrizaje.Comoquiera que el dictador de Venezuela hace de su FAV lo que quiere, y el dictador ha hablado de sus deseos guerreristas, el caso del avión venezolano es bastante grave.No se supo quiénes venían en el avión y para qué lo hacían, no se supo qué carga traía el avión, que había traído maletines con dinero para los gobiernos argentino y boliviano. Como el gobierno paraguayo está acusado de sostener la política “bolivariana” no sería raro que algún maletín hubiera llegado.El avión no proporcionó al estado paraguayo ninguna información básica que permitiera hacer conocer la lista de pasajeros, el manifiesto de carga, y las razones de su aterrizaje.Un Hércules C 130 es un avión de gran envergadura y de gran capacidad de carga y pasajeros. Según se dijo llegaron catorce personas y se fueron doce. No se sabe quiénes se quedaron ni para qué. El avión tenía capacidad para volar a un aeropuerto mucho más cercano a Caracas y fingió necesitar combustible. Una comedia de enredos que justifica sospechar lo peor.El Vicepresidente presentó a Fernando Lugo un informe sobre el avión venezolano y según dice la prensa, Lugo dijo que “para él era normal”. El misterio quedará en eso. Lugo paralizará en adelante todo avance en la investigación.Si se hubiera planteado el caso de la forma habitual en otros países no sometidos al yugo de Caracas, ya el general Hugo Aranda, jefe de la FAP, hubiera sido destituido y pasado a retiro y los directores ejecutivos de las otras oficinas comprometidas hubieran sido reemplazados.La abierta inacción de los principales miembros del gobierno en lo relacionado con el avión venezolano parece demostrar que el dictador de Venezuela tiene grandes espacios propios en el Paraguay.

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